La firma electrónica avanzada aporta aún más seguridad a ciertos trámites que tenga que realizar un autónomo o sociedad limitada. Uno de los usos más comunes es la firma de contratos de prestación de servicios a distancia, con total seguridad y sin necesidad de tener que personarse físicamente para cerrar un contrato.
Otro uso común es la posibilidad de realizar ciertos trámites con la Administración. También a nivel europeo o con otros países, en el caso de que la actividad del negocio lo requiera.
Firma electrónica avanzada: más seguridad
Para que una firma electrónica se considere avanzada debe tener, un mayor nivel de seguridad que la firma simple. Además de eso, los sistemas de la firma electrónica deben cumplir también con una serie de requisitos legales.
Entre los requisitos que debe cumplir una firma electrónica avanzada figura que la firma se asocie a un único firmante. Para ello se debe utilizar un sellado de tiempo, esto es, un conjunto de datos que existieron y que ninguno ha sido modificado desde entonces.
Asimismo, para identificar al firmante se tiene que localizar el lugar exacto en el que se ha realizado la firma, por lo que se debe registrar la dirección de origen y la de destino de la solicitud. En este caso habrá que capturar los datos biométricos del grafo, consiguiendo tener una información justificado en caso de disputa.
Sin modificación
En la firma electrónica avanzada también se deben impedir cambios posteriores, por lo que se debe garantizar al solicitante y al firmante que la firma no va a poder modificarse una vez se realice. Cabe recordar que en la firma electrónica avanzada se cifra la documentación generada con un sistema de encriptación.
Para poder solicitar una firma electrónica avanzada sin utilizar un certificado de firma, se necesita, por ejemplo, un código de un solo uso OTP que se envía al móvil del firmante. A través de él se logra identificar al firmante con exclusividad, teniendo un control e impidiendo cambios posteriores a la solicitud.
Por otro lado, también puede conseguirse la firma electrónica avanzada mediante un certificado no cualificado. En este certificado se incluirán todos los datos necesarios para la creación de la firma que detectarán cualquier modificación que lo invalide.
Fuente e imagen: Cinco Días