El pago único es una posibilidad que tienen los emprendedores a la hora de iniciar su actividad, de modo que si les pertenece prestación por desempleo en el momento de dar el paso, pueden solicitar les abonen el dinero de su paro.
Para poder justificar correctamente esta capitalización siempre debe ser solicitada antes de los 30 días posteriores al inicio de la actividad así como entregar la documentación necesaria para evidenciar que el dinero del paro único ha sido invertido en su nueva actividad económica por cuenta propia.
Si la actividad que ha iniciado es diferente de la que constaba en la solicitud y en la memoria pero se ajusta a lo establecido en la normativa, tendrá que presentar una nueva memoria. Además, es probable que desde el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), te reclamen más documentos.
A la hora de justificar, puede darte que la nueva actividad cumpla con los requisitos, que el proyecto se considere viable y que la cuantía que requiere su puesta de largo se ajuste a lo concedido inicialmente.
Pero también puede darse que se cumpla con los requisitos legales y con la consideración de viabilidad del proyecto pero que la cuantía recibida no coincida con la memoria, por lo que el SEPE tendrá que dictar una nueva resolución. Aquí cabe la opción de que te reclame parte del dinero concedido.
Por último, si no se cumplen los requisitos legales ni el proyecto se considera viable el SEPE reclamará todo lo abonado en concepto de pago único.
Los emprendedores deben tener presente el hecho de destinar la cantidad concedida a su incorporación como socio o social o como persona trabajadora de una cooperativa o actividad laboral, así como a la realización de la actividad como trabajador autónomo o trabajadora autónoma.
Destinar el dinero del pago único a otros fines acarreará una falta muy grave, con su consecuente sanción, que es la devolución íntegra del dinero y la exclusión del derecho a recibir cualquier prestación económica o ayudas de fomento de empleo durante un año.
Fuente e imagen: Cinco días